EL SOL (XIX)


 

EL SOL (XIX)

 

Este luminoso arcano, uno de los más bellos, encierra en su simbolismo la gran divinidad natural que todo lo fertiliza y vivifica. Es el padre cósmico universal por excelencia, y por eso siempre hace alusión a la figura del padre, o a la de los hermanos dependiendo del tarot con el que trabajemos. El Sol provee de luz y calor a la Tierra y a todos sus habitantes, y por tanto, representa la luz primordial, esa que todo lo purifica e ilumina.

 

Como se puede observar en la mayoría de las barajas, su alegoría es la de una carta muy armónica que habla de transformación personal, de renacimiento a un nuevo camino de iluminación interior. Es, por tanto, un indicativo de que la persona ha combinado y equilibrado con éxito las tendencias y aspectos más divergentes de su personalidad en un nuevo “yo” más espiritual y equilibrado, hablando de una evolución a todos los niveles, de una apertura a un nuevo ciclo de mayor claridad y brillantez.

 

En cuestiones adivinatorias el Sol es un arcano positivo e iluminador, de buen augurio y con vaticinio esperanzador, que indica alegría y contento, felicidad, plenitud y buen humor, un optimismo en general debido a la auto-satisfacción y también, por qué no, a una salud pletórica. Su aparición nos alienta a experimentar la grandeza de la vida y a confiar en nosotros mismos para poder realizar nuestros sueños.

 

Cuando el arcano XIX surge en una consulta, podemos estar seguros de que indica un próximo entendimiento con el prójimo, una etapa de ideas más creativas y luminosas, de más fe en uno mismo y en el camino a seguir. Siempre es sinónimo de nobleza y generosidad, de sentido común y buena predisposición para solucionar un conflicto o problema. En cuestiones laborales nos indica logros, éxitos y beneficios, sustanciosas ganancias y buena reputación, incluso celebridad y fama, satisfacción o fortuna. Puede aludir también a políticos, mecenas o protectores. En resumen, salvo en ocasiones muy escasas en que no aparezca bien aspectado o posicionado, siempre habla de un presagio favorable.
Invertido, o acompañado de arcanos negativos, habla de adversidad y obstáculos, de fracaso profesional o comercial, tal vez provocado por falta de padrinos o ayudas externas, lo que se verá acrecentado por una fuerte arrogancia y vanidad. En general indica falta de armonía, infelicidad o peleas. Puede revelar la existencia de enfrentamientos en la pareja, de ruptura de compromiso, o de separación y divorcio. En ocasiones, si no nos hemos casado todavía, refiere que existirán impedimentos familiares o sociales para contraer matrimonio.

 

PROFESIONES: frecuentes dentro del ámbito infantil y juvenil, como educadores, canguros, pediatras…

 

LUGARES: abiertos, como desiertos o playas. Países cálidos. Sitios de vacaciones. Fiestas. Hace referencia a una capital.

 

AMOR: alude a la felicidad, armonía conyugal y satisfacción sexual. Habla de enamoramiento, voluptuosidad, matrimonio y maternidad o paternidad feliz. Bien posicionado, el arcano indica bienestar hogareño.

 

SALUD: rige el corazón, las arterias (en ocasiones suele referir presión arterial), la visión y los ojos. Marca vitalidad, vigor, y si estamos enfermos, una próxima curación.

 

CLIMA: augura calor y tiempo veraniego, así como la presencia de anticiclón. Indica la existencia de buena visibilidad en general.