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Desde que era una niña he sido una apasionada de los sueños, y he tenido experiencias significativas con el mundo onírico. Un fuerte sonambulismo me marcó desde la infancia para dar paso, ya más adulta, a una conexión especial con los mensajes que me llegaban a través de los sueños, y que a día de hoy todavía se siguen produciendo, en ocasiones de manera muy especial.
Las vivencias que he tenido a lo largo de mi vida originaron que desde hace bastantes años los venga estudiando de manera exhaustiva y analizando, tanto a nivel personal como en términos generales. En la actualidad, no sólo realizo dicho estudio desde el punto de vista de la mera interpretación – considero que uno mismo es quien mejor puede comprender los mensajes que le llegan a través de los sueños -, sino que además trato de profundizar en por qué se ha producido ese mensaje.
A este respecto, me considero seguidora de las teorías de Carl G. Jung. Pienso que el enfoque que él les dio en toda su obra es uno de los mejores y más certeros que existen. También soy admiradora de la obra de otros autores y estudiosos más recientes, como Michel Jouvet, Robert Bosnak o Stephen LaBerge.
Hay que saber que el sueño es una herramienta terapéutica de gran potencia que favorece el autoconocimento, la comprensión de aspectos propios de la persona, la integración de diferentes facetas que poseemos, y la resolución de problemas internos. Por otro lado, los sueños también nos pueden aportar información sobre cuáles son aquellas emociones que hemos tenido durante el día y de las que, a lo mejor, no hemos sido conscientes. En los sueños muchas veces estas sensaciones vividas vuelven a aparecer en otro escenario y con otros personajes.
Podemos experimentar en sueños aquello a lo que durante el día no hemos prestado atención y ha causado una emoción fuerte en nosotros. Esto es posible dado que en la noche tenemos acceso a toda la información del cerebro para crear nuestros sueños, algo que no ocurre durante el día dado que estamos atentos a la realidad y a dar respuesta a lo que está sucediendo.
El mundo onírico ha recibido toda clase de interpretaciones, entre las que se encuentran aquellas de carácter místico, de carácter profético, de carácter premonitorio… Sin embargo, no hay que olvidar que los sueños también responden a los acontecimientos y preocupaciones que nos envuelven. Por eso, conocer las manifestaciones más comunes y saber aplicar una interpretación real es una de las formas más satisfactorias de profundizar en nuestra vida y mejorarla. Y si el sueño tiene algo especial, también lo podemos averigüar y entender su mensaje para que no nos inquiete ni perturbe.
Si estás atravesando un momento difícil, si tienes sueños extraños e incomprensibles, si son recurrentes, inquietantes…, te puedo ayudar. Son ya numerosas las personas que han solicitado mis servicios y han quedado satisfechas al resolver su inquietud.
Mis consultas son económicas y están al alcance de todo el mundo. Date la oportunidad de resolver tus inquietudes y recuperar la tranquilidad y la felicidad.